La historia sigue a Bentos Sagrera, un joven de campo cuya vida amorosa se ve marcada por las pasiones, los desencuentros y las costumbres de la época. A través de su protagonista, De Viana presenta un retrato vívido del gaucho y sus valores, mostrando las dificultades. La novela no solo es una historia de amor, sino también una crónica de la sociedad de la época, con sus códigos de honor, sus prejuicios y su conexión con la naturaleza.